Para el grupo ADEPSI cada nuevo año trae consigo nuevos retos, nuevas ideas de trabajo, nuevas propuestas y formas de hacer. Nuestro objetivo es dar respuesta a las inquietudes de una sociedad cambiante y que los servicios se adapten a las necesidades de las personas atendidas y sus familias, y no a la inversa. 

De nuevo en 2020 Fundación Tutelar Canaria Adepsiy Asociación Adepsi aúnan esfuerzos y estrategias de trabajo con la finalidad de detectar y prevenir situaciones de riesgo y vulnerabilidad de las personas con discapacidad que usan nuestros servicios. Buscamos activar mecanismo y acciones que aplaquen o minimicen el riesgo. 

Para ello, se ha conformado un equipo de trabajo, en marcha desde febrero y que, pese a la peculiaridad de las circunstancias de estos meses, ha mantenido su compromiso de trabajo con el proyecto denominado “Cuando yo no esté”. 

Sabemos que este interrogante convertido en afirmación es la mayor de las preocupaciones de muchas familias que prestan día a día infinidad de apoyos a las personas con discapacidad. 

Si los profesionales de lo social tuviéramos que elegir el mejor recurso para trabajar en la prevención de riesgo de una persona, muchos coincidiríamos en que el mejor recurso es la familia. Por este motivo, tanto las persona con discapacidad como sus familias serán el objeto de esta intervención ampliamente preventiva.

Este trabajo conjunto se ha tornado fundamental no tan solo para detectar y prevenir situaciones de riesgo, sino también para acercarnos a la realidad de cada núcleo familiar. Hemos diseñado una herramienta con indicadores que atienden a diferentes dimensiones de la vida de la persona (personal, red de apoyo, económico y vivienda), los cuales pueden ser cuantificados aportando un dato objetivo que guíe la intervención con esa persona/familia. 

Además, este proyecto contempla acciones informativas y de asesoramiento como medio para que las familias sean conocedoras de la cantidad de alternativas y acciones existentes para que toda aquella que la necesite pueda valorar e iniciar las acciones de relevo generacional o planificación de futuro de la persona afectada, invitando en todo momento al respeto que merece el plan de vida de cada uno y de cada una.